Los "Superhombres Ibéricos" aterrizan en Bartleby

Ayer tarde tuvo lugar la presentación del libro "Superhombres Ibéricos" de Pedro Porcel publicado por Edicions de Ponent en la librería Bartleby de Valencia. Presentado por Álvaro Pons, transcurrió de forma distendida la conversación entre ambos, diciendo Pons de Porcel que es un historiador del comic, con varias obras publicadas como la "Historia del Tebeo Valenciano" o "Tragados por el abismo" además de colaborar en distintas publicaciones. Pons preguntó de primeras cómo se gestó "Superhombres Ibéricos", respondiendo Porcel que el boceto surgió en "El desván del abuelito", un blog en el que escribe sobre tebeos, cine y otros temas más o menos bizarros, y con el libro pretende acercar la subcultura del comic a un público que no es el habitual. Mack-Wan el Invencible fue el primer superhombre español, y el que le animó a escribir el libro. Superhéroe suena como más americano y superhombre es más ibérico, hasta el año 2000 en que el superhéroe hecho en España se acerca al americano y muchos creadores españoles terminan trabajando para Estados Unidos. El libro abarca cine, literatura popular y se ve la evolución aunque los héroes españoles son más de andar por casa. Comienzan en el folletín o las novelas pulp de mano de Canellas Casals, guionista que también era dibujante. El folletín acaba tras la guerra civil casi de raíz, allá por 1939 y se mantiene el pulp y la historieta como fenómeno popular. Pons comenta que podían haber copiado a los superhéroes americanos, aunque para Porcel es una reinterpretación, Mack-Wan es anterior a Superman por lo que no hay retroalimentación. Hasta los años 50 no llegaron los tebeos de superhéroes americanos a España, pero Julio Ribera en Robín y el murciélago fusiló a Batman de unas planchas que le enseñó alguien y como solo llegaban hasta la página 3 dijo que él podía continuarlo. 

El sentido de la aventura viene dado por Canellas, el guionista más influyente, que concibe la fantasía como un desfile carente de lógica. En España crea la "espada y brujería" en los años 30, que Porcel nombra como "navaja y brujería". A partir de los años 50 hay un cambio cuando llegan los tebeos de Superman y se va acercando el superhombre español al modelo americano. Los tebeos de Novaro se van implantando y los editores españoles piden que se prohiban porque son competencia directa. Tras la llegada de los comics Marvel publicados por Vértice, se va perdiendo el superhombre español. Pons comenta que los tebeos de Fleetway y sus superhéroes son más cercanos a los españoles, respondiendo Porcel que es a causa de que buscan la diversión simple, no tenían conflictos internos como los de Marvel. La idea de Superpumby creado por Sanchis es la de emular a Superman, y como genuino superhéroe español tenemos a Supersonic Man del que se adaptó la película al comic, también por Sanchis. En los 90 muere el superhombre por el mundo globalizado, el producto final es más perfecto pero no lo siente como propio, con el ejemplo de Iberia Inc, pensado como un producto americano tanto en el guión como en el dibujo. Este libro lo ha escrito como preservación de la memoria además de hacerlo por diversión ya que la cultura popular de los años 30, 40, 50 y 60 se ha perdido, para recordar que existió todo un mundo fantástico en España. Una charla amena que finalizó con la firma de ejemplares del libro por parte del autor.