Finaliza la etapa de Matt Fraction y David Aja en la serie "Ojo de Halcón" en este tercer tomo que lleva por título "Río Bravo", publicado por Panini en la colección 100% conteniendo los Hawkeye #13-22 USA. Tras la muerte en el número anterior de Grill, uno de los vecinos del edificio de Clint, se reúnen todos sus amigos en el funeral con la presencia en las sombras de la banda del chandal y su asesino, Kazi. Barney, el hermano de Clint, sigue instalado en su casa, mientras Bobbi junto a Clint investigan a la banda del chandal, descubriendo el interés que tienen por hacerse con el edificio, el objetivo de una corporación para urbanizar y convertirla en zona de lujo. La banda del chandal ataca de nuevo, y Kazi deja gravemente heridos a ambos hermanos. Tras recuperarse, urden un plan para eliminar a los mafiosos de una vez por todas con la ayuda de los vecinos del inmueble y una llegada inesperada, aunque dejará trágicas consecuencias.
Por otro lado, encontramos a Kate en Los Ángeles, donde se ha marchado tras discutir con Clint y continúa buscandose la vida como "heroína a sueldo", resolviendo casos sencillos pero metiéndose en líos. Descubrirá la trama que ha montado Madame Máscara con un negocio para las estrellas de Hollywood, que los mantiene en una eterna juventud, con ayuda de un misterioso personaje al que conoce en el supermercado. A modo de interludio tenemos un episodio en el que Clint se queda dormido viendo dibujos animados en la televisión de los "Amigos invernales", soñando como si él y sus amigos fueran interpretados por perros animados.
No podemos menos que destacar la enorme labor que Matt Fraction ha realizado con el personaje, con un final por el que ha merecido la espera tras retrasos en la serie. Ha dotado a Clint Barton de un aspecto urbano alejado de los superhéroes, sorprendiendo con los diferentes episodios que ha incluido ofreciendo otros puntos de vista, como el número de los dibujos animados o el que incorpora el lenguaje de signos para sordos. También bucea en el pasado de los hermanos Barton con el maltrato infantil, o el paralelismo que ofrece en el título del comic y su trama con el film de Howard Hawks.
En el apartado gráfico, David Aja se muestra insuperable, con soluciones gráficas sorprendentes. Por parte de Annie Wu, se encarga de dibujar la historia de Kate con estilo propio, pero que casa perfectamente con el espíritu juvenil de la jóven Ojo de Halcón. El episodio animado corre a cuenta de Chris Eliopoulos, donde vemos perfectamente reflejados los personajes de la serie.
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