VI Jornadas de Comic de Valencia: Sábado

El sábado es el plato fuerte de las VI Jornadas de Comic de Valencia, con charlas durante todo el día y sesiones de firmas al aire libre en la plaza de Tapineria. El encargado de abrir las charlas ha sido Álvaro Pons, presentado por Javier Gay, acompañados por Ricardo Engra, hablando sobre el libro "La cárcel de papel" que recopila artículos publicados en el blog del mismo nombre. Un libro de 600 páginas que recoge en siete capítulos lo mejor del blog, no en orden cronológico ya que se hacía pesado, ordenado por temáticas. Según su opinión, los blogs han muerto, sustituidos por reseñas de 140 caracteres o un enlace que te lleva al blog. Cuenta que al leerlo de nuevo hay cosas que cambiaría pero no lo ha hecho, aunque le da vergüenza ajena. En cuanto al comic de superhéroes le gustaban de niño las historias de Batman publicadas por Novaro, pero al desaparecer las revistas volvió a leer superhéroes con la llegada de Marvel a Forum, ahora no le interesan.

A continuación, Pons presentó "Intemperie" de Javi Rey, obra ganadora del premio al Autor Revelación en el pasado 35 Salón del Comic de Barcelona, otorgado por la Fundación Divina Pastora. Esta novela gráfica es una adaptación de una novela de Jesús Carrasco, convirtiéndola en un western al que el autor situa en la España profunda. 

Más tarde tuvo lugar una charla entre Daniel Torres y Álvaro Pons sobre los "35 años de Roco Vargas" cuya exposición se hallaba en la misma sala. Con su último álbum titulado Júpiter", se cierra una etapa en la historia del personaje, es un final y también un comienzo para Roco Vargas. Tiene una mayor extensión que otros álbumes y ha trabajado con color directo, en algunas ocasiones creando dobles páginas, algo poco habitual en él.

La presentación de novedades de GP Ediciones realizada por Javier Marquina fue la que cerró la mañana, acompañado por Bernal y David Rubín que se unió a la charla. Comenzaron con Laura Rubio y Queronea, un álbum sobre una batalla griega en la que participaba un destacamento formado por amantes. Vicente Montalbá presentó Mundo extraño, una aventura al estilo de un videojuego que te conduce por diferentes niveles hasta descubrir su destino final. Carlos Azagra  con su último trabajo, Revuelta porcina, con color de Encarna Revuelta, es la tercera parte de "El último aragonés vivo" y trata de la revolución de los cerdos contra los humanos tras años de servir como alimento, todo en clave de humor.

El primer acto de la tarde fue una conversación entre David Rubín y Victor Puchalski repasando sus obras, comentando Rubín que en este mundo del comic hay dos caminos, el del autor y el del dinero. Con el del autor hace lo que le apetece, aunque es más duro; con el del dinero estaría mejor pagado pero no sería una obra suya. Al publicarse "El héroe" tuvo la suerte de que Paul Pope, uno de sus autores favoritos, se fijara en él para hacer el comic de "Aurora West", abriéndole las puertas de la industria norteamericana. Con Santiago García retomó un antiguo proyecto del guionista titulado "Beowulf" que iba a dibujar Javier Olivares pero no se llevó adelante, rehaciendo el trabajo Rubín. Comentó que tiene suerte de hacer lo que le gusta y tener trabajo, ahora para una editorial de la que no puede decir su nombre. Hubo tiempo también para hablar de sus detractores, pero es algo que no le preocupa lo más mínimo y no le da importancia.

Agustina Guerrero, más conocida por su personaje de "La volátil" protagonizó la charla más multitudinaria de la tarde junto con Ricardo Engra, con una sala abarrotada de público. La autora cuenta las historias de una treintañera que comenzó anotando en una libreta a modo de diario y que tras publicarse en Internet se recopilaron en "Diario de una volátil". Tras el éxito obtenido comienza a ser cada vez más conocida y en su cuenta de Facebook tiene más de 700.000 seguidores actualmente. 

Para finalizar se celebraron los 40 años de la revista El Jueves con Pedro Vera, Lalo Kubala, Raúl Salazar, Bernal, Juanjo Cuerda, Julio Serrano y la antigua directora Mayte Quílez en la que se habló sobre los límites del humor y lo políticamente correcto, que según ciertas personas resulta molesto el tratamiento del humor dado a desgracias o catastrofes.