"Superhéroes del lápiz" en la revista feelFord

La revista feelFord es una publicación que se distribuye a clientes y empleados de Ford España, con artículos sobre las novedades en vehículos y tecnología de la empresa. En el número de Otoño 2011 se ha publicado una entrevista (de la que hemos extraído algunas declaraciones) con diversos dibujantes españoles que trabajan para Estados Unidos, como  Carlos Rodríguez, Bit y Sergio Ariño, quienes han realizado también una ilustración del Ford Fiesta Sport Match con un superhéroe creado para la ocasión. El nexo de unión entre estos dibujantes es David Macho, agente de autores españoles que lleva más de una década en este negocio, asesorándoles en su trabajo. Según comenta David "son profesionales completísimos, saben de anatomía, dibujan fondos, simulan perspectivas, ponen texturas... además de contar una historia y dibujarla al ritmo de una página diaria". Carlos Rodríguez  ha trabajado para las dos grandes, Marvel ("Hulk") y DC ("Batman & The Outsiders") y comenta que "el nivel de exigencia en cuanto a dibujo y fechas de entrega es mucho mayor en Norteamérica, pero gracias a eso te da el sueldo para vivir".

Por lo que respecta a Bit, seudónimo de Javier Bergantiño, tambíen ha trabajado para DC, casi siempre como entintador en series como "Wonder Woman" y "Superman", y su trabajo es "divertido a veces, otras no tanto, ya que puedes echar catorce horas diarias sobre una mesa de dibujo o la tableta gráfica de un ordenador". El último autor entrevistado es Sergio Ariño, que ha dibujado series como "Ms. Marvel" y "Thunderbolts" para Marvel, y "Titans" o "R.E.B.E.L.S." para DC. Sergio explica que la tecnología actual les ha facilitado mucho su trabajo, puesto que "en el primer encargo que realicé para DC Comics tuve que enviar las páginas a través de una empresa de paquetería para que el entintador pudiera trabajar sobre ellas, con el consecuente retraso en los plazos". En el resto de la entrevista David Macho comenta que el rigor profesional es lo más importante en estos artistas, para que los editores americanos confíen en ellos a la hora de darles trabajo, o la situación del mercado español en el que sólo Ibáñez puede vivir del comic cómodamente.