"El invierno del dibujante" presentado en Fnac Valencia

Una nueva presentación de "El invierno del dibujante" en Valencia, en esta ocasión en Fnac San Agustín, que como es habitual, contó con numerosa presencia de seguidores de Paco Roca. Le acompañaron en la presentación Ramón Palomar, MacDiego y Modesto Granados, quienes en tono desenfadado y como si estuvieran en una reunión de amigos (que lo son), presentaron el trabajo de Paco. Ramón Palomar comentó que ha leido dos veces "El invierno del dibujante" y le parece el trabajo más completo del autor, así como en el que ha trabajado más detalles de sus viñetas. Del álbum se queda con la imagen del lápiz rojo con el que González tachaba lo que no le gustaba o no se podía publicar, y la escena en la que Vázquez le quita dicho lápiz y González se dirige a un cajón donde guardaba grandes cantidades de lápices rojos.  Paco Roca se ayudó de unas proyecciones para contar un poco su trabajo de documentación para realizar el comic, y de paso ponernos en situación con los tebeos de su infancia, como el "Mortadelo" o las "Joyas Literarias Juveniles", y se imaginaba en su infancia cómo sería la Editorial Bruguera, como la fábrica de chocolate de Willy Wonka. Comentó la aparición de la revista "Tio Vivo" con los cinco autores que en cierto modo fueron pioneros por ser los primeros autores que fundaban una revista controlando sus personajes, algo que nunca se había visto en otros países.

Esto sirvió para que otros dibujantes como Ibáñez, Raf, Nené o Segura ocuparan el lugar de los fundadores de "Tio Vivo", pues de otro modo no hubieran tenido esa oportunidad de trabajo. Paco fue a visitar el lugar donde estaba la editorial Bruguera, y el bar donde se reunían los dibujantes, hoy en dia ha cambiado de nombre pero encontró a un señor mayor que le contó anécdotas de cómo era en aquella época ya que estuvo allí con todos esos autores. Por su parte, Modesto contó de nuevo su historia de amor con los tebeos, es algo que cambia con el tiempo sin tener el interés en la actualidad como cuando era un crío o la historia del tebeo que se llevó a escondidas de casa de sus primos. MacDiego hizo una de las suyas, primero habló de los bocetos y las notas que le pasa Paco antes de publicar el trabajo, las páginas que tiene oportunidad de ver antes que se publique, y dijo que le habia parecido muy bueno el diseño de la obra, las distintas tonalidades que separan los capítulos. Luego le encontró un "pero", y las páginas que no le gustaban las arrancó de un ejemplar, algo que provocó las carcajadas del público. Tras finalizar la divertida charla, se procedió a la ya consabida sesión de firmas.