"Joker: La sonrisa del Demonio" por Dixon y Aparo

Dentro de las recuperaciones de material de Batman que viene haciendo ECC, en esta ocasión es el turno de una aventura compartida con el Joker y Ra´s Al Ghul, publicada originalmente el año 2001 en Legends Of The Dark Knight #142-145 USA. El Joker se encuentra en Arkham donde es secuestrado mediante un engaño, fingiendo trasladarlo al Instituto Nacional de Salud Mental para estudiar su caso. Una doctora y su guardaespaldas son los que se ocupan de trasladarlo, hasta que el doctor de Arkham confirma que ha sido una treta para llevárselo, por lo que avisa a la Policía. Gordon junto a Batman revisa las cintas de vigilancia, pero el rostro de la mujer no se ve claramente, como si interfiriera algo para no reconocerla. Con ayuda de Oraculo, Batman descubre que se trata de Talia Al Ghul,por lo que Batman y Alfred se dirigen a Marsella para que Ducard les ayude en su busqueda. Mientras tanto, Talia lleva al Joker ante su padre, Ra´s Al Ghul, ya que necesita al Payaso para contrarrestar al Detective, y poner en marcha un plan con el que hacer un mundo mejor, eliminando a 5.000 millones de habitantes. El Joker asalta un laboratorio de armas biológicas quraquí situado en aguas internacionales, donde se hace con un virus en esporas para liberarlas en el Atlántico y la lluvia se encargará de esparcirlo sobre la Tierra. Batman con Ducard y Alfred descubren el paradero de sus enemigos, pero la traición entre Joker y Ra´s al Ghul se hará evidente para sólo quedar uno.

La historia que nos presenta el veterano escriba Chuck Dixon resulta entretenida, a pesar de no ser una gran obra, pero conociendo como conoce a los personajes, está bien escrita y bien resuelta. La ambición de Ra´s Al Ghul por hacer un mundo mejor, aún a costa de eliminar vidas humanas, y la locura del Joker son las características que explota Dixon en esta historia, así como el giro final con la traición entre ambos por lograr su objetivo. En cuanto al dibujo de Jim Aparo, un dibujante de la escuela clásica, nos hallamos ante uno de los últimos trabajos de su carrera ya que falleció en 2005. Aunque se nota en algunas páginas claramente su estilo, resulta muy diferente de lo que hizo en series como The Brave & The Bold o su paso por Batman y Detective Comics, el cual queda oculto por las tintas de John Cebollero, al igual que contar con varios coloristas como James Sinclair, Noelle Giddings y Digital Chameleon tampoco favorece. De todas formas, este ejemplar es una lectura agradable realizada por un equipo creativo que no te defraudará.