El nuevo trabajo de Vicente Montalbá (Carroñero, Valentia, De Muerte) es una novela gráfica de 226 páginas publicada por GP Ediciones de manera reciente. El protagonista del comic, un personaje sin rasgos, aparece sin saber cómo en un paraje desolado, en el que va encontrando objetos y seres extraños. El primero, un mandril con el que entabla una pelea en su cabaña por creer que va a robarle su comida. Al eliminarlo, nada más queda de él que los objetos que llevaba encima, así como el rostro del mandril, que se coloca nuestro amigo. Descubre también un extraño libro, en el que sólo aparecen nombres, como firmas, y en un acto reflejo, escribe su nombre, Bititor. A continuación salva a una mujer humana, Antheia, de las garras de un pueblo de lagartos. A cambio de recuperar un tótem sagrado, Antheia le promete que su padre le compensará con oro y ella será su esposa. Pero después de ausentarse Bititor, Antheia ha desaparecido. Cada capítulo que pasa se enfrenta a algunos desconocidos en busca del tótem, como una gata que le roba su potencia muscular. Bititor llega a un poblado humano asaltado por los lagartos que son los que se apoderan del tótem y raptan a Antheia. Más tarde salva de una colonia de hormigas guerreras a un ratón, Cervero, que se convierte en su aliado. En una conversación con Cervero, Bititor le comenta que tiene la sensación de que alguien está detrás de todo esto, moviendo los hilos, respondiendo Cervero que es "Él", alguien que piensa es un dios que guía sus actos. Después de un ataque al hormiguero y comprar más armas para rescatar a Antheia, asaltan el búnker de los lagartos donde tienen retenida a su amada, pero Bititor sigue buscando al Creador, llegando a un final sorprendente.
En "Mundo extraño", Vicente Montalbá explora la identidad del ser humano y la búsqueda de un ente superior, cuestionándose si es el que toma las decisiones del protagonista, manejándolo como si fuera una marioneta. Preguntas existenciales que podemos plantear nosotros mismos, pero en este comic se acompaña de aventuras, humor, metafísica y algo de sexo, con un final que te hará reflexionar. El dibujo de Montalbá es de trazo fuerte y con estilo propio, con influencias del comic underground, pero suficiente para crear este mundo extraño y los seres antropomórficos que habitan en él.
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