Con motivo de los diez años de la salida de "Criminal", Ed Brubaker y Sean Phillips publicaron un par de números especiales en 2015 y 2016 (Criminal Special Edition y Criminal: 10th Anniversary Special) para retomar la serie por diversión. Fueron ambos recopilados un año más tarde en un tomo titulado "Criminal: Wrong Time, Wrong Place", que forman este "Criminal 7: Mal momento, mal lugar" publicado en España por Panini. Estos números los protagoniza Teeg Lawless (un personaje que aparece en "Criminal: El último de los inocentes"), quien tras un atraco se ve envuelto en una pelea de bar, arrestándolo la Policía por una infracción de tráfico anterior. Condenado a un mes en prisión, alguien ha puesto precio a su cabeza, luchando cada día por su vida. Mientras tanto, la única compañía en su celda son los comics de espada y brujería de un guerrero llamado Zangar, que obtiene en la biblioteca de la cárcel. Tras cumplir la condena y recibir varias palizas, le espera su colega Ringo, que trabaja para Sebastian Hyde, su jefe, y Lawless llega a su casa donde le espera su familia. Más tarde va a por su parte del botín con su hijo Trace, quien le espera en el automóvil, mientras Teeg se lleva una enorme sorpresa.
La segunda historia transcurre unos años después, cuando Lawless y su hijo Tracy emprenden un viaje por carretera buscando en un pueblo a una mujer llamada Lana, y para no despertar sospechas le encarga a su hijo que la busque en el supermercado. Una vez localizada, Lawless la sigue, mientras Tracy busca un comic de "Colmillo, el hombre lobo Kung Fu" en la tienda de segunda mano del pueblo. Allí entabla amistad con una chica, Gabby, mientras Teeg realiza su trabajo. Al tratarse del hijo de un delincuente, Trace no quiere profundizar en su amistad con Gabby, aunque el poco tiempo que pasan juntos es recordado con felicidad. Al regresar Lawless a por Trace, sabremos el encargo que ha realizado, evitando hablar con Gabby para evitar causarle daño.
Ed Brubaker sigue narrando de maravilla las historias policíacas y noir, en esta ocasión se centra en un secundario de "Criminal", un ladrón y asesino, que se puede comparar con el bárbaro Zangar que aparece en las páginas de Savage, el cómic que lee en prisión. Como dice el bibliotecario, "Matar es lo suyo", estableciendo un paralelismo con Lawless. También se podría comparar la historia del comic Deadly Hands en la que el protagonista se enamora de la chica de su amigo, con la relación entre Tracy y Gabby, además de ser como una road movie. El arte de Sean Phillips, aparte de su estilo de trazo duro pero definido, intercala páginas de ese comic dentro del comic, adoptando el formato magazine en blanco y negro al estilo de las revistas de los años 70, con las páginas amarillentas y usando tramas, cambiando su estilo al de un Tony de Zúñiga o Ernie Chan en Conan y en Deadly Hands combinado con Werewolf By Night. El coloreado de Elizabeth Breitweiser es magnífico, aportando ese toque ambiental perfecto para la obra. En cuanto a la edición de Panini, han publicado el tomo recopilatorio, aunque no reproducen las portadas originales en el interior, dejando las variant covers a un tamaño jibarizado y aprovechando seis páginas para publicitar otras obras de Brubaker y Phillips. A pesar de este pequeño error, muy recomendable aunque leas por primera vez "Criminal", ya que son historias autoconclusivas.
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