Nueva entrega de "El Batman que ríe" que llega a su sexto número publicado en España por ECC, conteniendo The Batman Who Laughs #5 USA. Al final del número anterior, dejamos a Batman en una situación comprometida, cuando los guardias de Blackgate abren fuego contra él creyendo que es el Batman que Ríe. La capa de kevlar aguanta la lluvia de balas, pero Batman conoce a estos agentes, sus nombres, sabe donde viven y consigue que confíen en él cesando de disparar. Por otra parte, Gordon continúa prisionero del Caballero Sombrío en las alcantarillas, quien lanza a los Robin Oscuros contra el comisario siendo herido, y rescatado en el último momento por su hijo James. Mientras tanto, el Batman que Ríe visita al Tribunal de los Búhos para pedirles ayuda en su plan y al negarse, reciben una dosis de su propia medicina, a la vez que el Batman que Ríe se enfrenta a uno de sus Garras. Finalmente, Gordon y su hijo se reúnen con Batman, quien muestra cada vez más su transformación. Gordon le comunica que el Batman que Ríe está punto de conseguir el suero que transformará a los habitantes de Gotham, pero deben poner en marcha el sistema QREU (ya que ambos son los únicos que pueden activarlo) para evitar que el villano logre su objetivo infectando el suministro de agua. De repente Batman piensa que el Batman que Ríe ha tramado todo este plan como si lo quisiera desde el principio, que pusieran en marcha el sistema QREU, llegando en ese instante un mensaje holográfico con el Batman que Ríe. Este insiste en que Batman ponga su parte para activar el sistema, lo que hará de la ciudad un foco de oscuridad, dejando la última viñeta con la cuenta atrás inminente.
Otro intenso y excitante capítulo de la miniserie a cargo de Scott Snyder, que nos lleva a una página final con un cliffhanger angustioso. A pesar de algún tropiezo en la narración, Snyder logra atraparnos con los diálogos, geniales en el caso del Batman que Ríe enfrentado al Tribunal de los Búhos. Por parte de Jock, este es uno de los mejores números que ha realizado de la miniserie, con escenas de acción que muestran la tensión que viven los personajes en estupendas composiciones de página, apoyado por el color de David Baron, que capta perfectamente la atmósfera de locura y horror.
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